Caminando descalzos devotos cumplieron promesas a la Divina Pastora

Cuando tenía 16 años de edad, Istar Farías cayó de una infraestructura que tenía 16 metros de alto. «Afortunadamente quedé viva, pero los médicos no me daban esperanza de volver a caminar», aseveró Farías.

Cuenta que pidió con fe a la Divina Pastora volver a caminar y destaca ella que el milagro le fue concedido, razón por la cual desde hace nueve años cumple esta promesa caminándola descalza desde el pueblo de Santa Rosa hasta la Catedral.

Una pago de promesa similar cumple Omar Tovar, caminando con sus pies desnudos sobre el asfalto de la avenida Venezuela, con el sol intenso y el calor abrasador. «Tengo ocho años caminando la Virgen y desde hace tres años lo hago descalzo», aseveró.

Dijo que esto lo hace tras un episodio de salud que tuvo con una de sus hijas menores. Cuenta que le pidió a la Virgen que la hija pudiera superar la situación adversa de salud y como pago de promesa haría descalzo la procesión en señal de agradecimiento. El favor fue concedido, razón por la cual hace descalzo la peregrinación.

Otros favores parecidos, la mayoría vinculados a la salud, cumplieron este año los venezolanos, caminando descalzos la procesión, que culminó en la Catedral de Barquisimeto, con la llegada de la imagen de la virgen, en la tarde de este martes barquisimetano soleado.

A partir de esta tercera semana de enero la imagen de la Virgen recorrerá las iglesias de la capital larense, para luego regresar a su nicho, la iglesia del pueblo de Santa Rosa, el próximo mes de abril.

AVN