Según una nota publicada por HispanTV, esta decisión de Londres se produce después de que el primer ministro británico, David Cameron, afirmara el pasado domingo que su Gobierno tiene una “determinación extremadamente fuerte” en cuanto a la zona disputada y que “lucharía” por conservar las islas Malvinas.
Cameron hizo estas declaraciones después de que el pasado 3 de enero la presidenta argentina, Cristina Fernández, en una carta abierta dirigida al premier británico, exigiera al Gobierno de Londres el fin de la colonización de las islas.
El ministerio de Asuntos Exteriores de Argentina, tras calificar de agresivas y violentas las amenazas bélicas lanzadas por el Reino Unido, exigió el lunes en representación de todos los argentinos la salida de las tropas y aviones de guerra británicos de las islas Malvinas.
Anteriormente, Londres había enviado submarinos nucleares a este archipiélago con el fin de protegerlo de una posible acción militar argentina, acto que fue aprobado por Cameron.
Esta medida de Londres no sólo provocó las críticas de Argentina, sino las de la mayoría de los países latinoamericanos.
Desde 1833, el Reino Unido ocupa las islas Malvinas, situadas a 250 leguas marítimas de las costas argentinas; desde entonces el archipiélago es un asunto de disputa entre Londres y Buenos Aires. En 1982, en un conflicto militar entre ambos países, 649 argentinos y 255 británicos perdieron la vida.
Argentina ha pedido en reiteradas ocasiones al Gobierno británico sentarse a la mesa de negociaciones para resolver la disputa de soberanía; sin embargo, desde Londres se han negado a discutir el asunto con el Gobierno del país sudamericano.